El caudal de vigilia…

 

 

 

El caudal de vigilia que surge de lo oscuro
anima seres, cosas, que no están ya en el mundo;
crispada pleamar de un sueño más profundo,
que curva la constancia de la onda hacia el futuro.

El tiempo se adelgaza –ya cerca del estuario
la corriente–, numera sólo ahora el movimiento; [*]
mañana un solo alud, cada ayer un copo lento
golpêando un suelo sordo – imanado y adversario.

Cuando ya nada ocurra, la quietud encendida
en la cérêa celdilla sin conciencia de sí,
derrochará por nadie ‹horizontes de sucesos›: [*]

de su gravitación desvalidos contrapesos
–comarca, amor, morada– nos retienen aquí…
¡Que a unidad desigual tal enigma la divida!

 

 

 

HAP