Semántica de la lejanía

 

 

 

¿No es la lejanía envés, contacto acosado,
distancia distraída
del mohín de la luz que, al fatigarse colmando,
atenúa siluetas, levitando titila
y constela tinieblas, vuelta plata indecisa?…

Es fuga distendida de lo íntimo,
crepúsculo en pïedra aprisionado,
cuando la errancia arroja de la onda del principio
miel furtiva del ámbar al bordado
con que a ansias de la espuma la playa labra alivio. [*]

Y es desmayo gradual en la grisalla
que deslíe las voces y figuras,
depone su patencia y desampara
la presencia pulsante, que perdura
mustia flor del vacío– sin recobrarse nunca.

 

 

 

HAP