Por los primeros mensajes
–Cloris, Coridón, Chiclana
(tal el nombre de Retama)–
compruebo un tanto azorado
que habéis dejado de lado
la estrófica reflexión:
ahí nomás, de sopetón,
dos se largan con sextina,
para a su voz argentina
darle cauce y cartabón.
¿Es que preferís la rima
alterna y consonantada
a la más laxa, reglada
por romancero español?
¡Más vueltas que un caracol
tiene este arte, y no yerro!
Vega, Florentino o Fierro,
payan de modo distinto
pero me dice el instinto:
«Mejor si dejo el cencerro.»
Y como en verdad me alegra
que libremente payéis,
sea en diez versos o seis,
aquí os cambio la estrofa
y sin escarnio ni mofa,
os canto como queréis:
asonante o consonante,
paralelo, especular,
mi plectro siempre puntea,
qué verso lo mismo da;
arte antiguo es y genuino
y digno de meditar.
Y pa’ que nadie se queje,
aderezo ya en la red
hoja de múltiple vínculo,
artilugio de internet:
que el mejor medre en su fama
y el mundo sepa quién fue.
Finalmente –y ya termino–,
si me permite, Chiclana,
con el respeto que debo,
le digo: «No es el camino»;
déjeseme de macana’,
no me lo apure al mancebo.
Porque ha usted de saber
que habla de un gran sonetista:
su verso es rubí, diamante,
jade, mágica amatista:
no hay macho a quien no conmueva
ni ninfa que lo resista.
Y ojo con la relación
en cuanto al tema del reto:
que bandera es cosa ’e patria
(más ahora no me meto)
debe pensar Coridón,
y con más de un vericueto.