QUE NADIE ENTONAN SU… [***]

 

 

 

que nadie entonan su

borde

ni empavesa el

pregón

sino que comas lo gradúa,

como joyas,

un peso

siempre azul, ausentes

de estos blocks: uno

al partir, que se

llevaban

la nube de prueba

cargadas, –decía– para que

mejor vendamos

al llover aquellas joyas

torrenciales

en las

ferias

de un viento

anterior: que todos

al llegar, recita recogidos aquel

verde

comercios ya

acallado

en las

comas, que

 

 

 

HAP