Concentra todo el mundo en la pupila…

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Para un grabado de Ana, en el que se representa el ojo de un ave

 

Concentra todo el mundo en la pupila:
lo que nace en el día y madura,
lo que la noche siega y sigila,
todo se imprime en esta miniatura.

Cada fragmento a su centro aspira,
cuando el tiempo se cifra en el minuto
en el caleidoscopio que inspira
a la figura varia un atributo.

«¿Ves en mi mirada intransitiva
la verdad que te acosa y esquiva?
Trabaja tu sentido en mis ojos:
hallarás la belleza y sus despojos.»